
Rubén Rodríguez Martínez se graduó en Fisioterapia por la Universidad de Jaén en el año 2017. En el contexto de la consecución de este título, realizó las prácticas en una empresa cercana a su localidad, en la serranía jienense de Segura, en una de las clínicas con más renombre de las provincias de Jaén y Albacete. Sin embargo, tal era la calidad de su trabajo a tan temprana edad que pronto los clientes comenzaban a demandar de forma exclusiva sin manos.
Todo ello le permitió, con solo dos años de experiencia laboral previa en el sector, abrir su propia clínica “Fisioterapia Manual Avanzada Rubén Rodríguez”, donde se especializó en fisioterapia deportiva, siendo ahora una de las nuevas generaciones especializadas en esta variante de la fisioterapia que más reconocimiento obtiene del sector andaluz.
Hoy dedicaremos esta entrada a conocer, de primera mano, la labor de Rubén como fisioterapeuta y como especialista en la rama deportiva de esta rama de la salud.
Pregunta (P): ¿Por qué decidiste estudiar fisioterapia?
Respuesta (R): Bueno, lo primero que esta es una profesión bastante vocacional, y debes tener pasión por ella. Yo, principalmente sabía que quería tener trato con personas, pero en un primer momento no tenía claro qué carrera elegir; pero, tuve un proceso de rehabilitación personal y a raíz de ahí comenzó a llamarme la atención.
P: Enfocándonos ya sobre la fisioterapia deportiva; con el paso de los años, ha evolucionado mucho, pero, ¿cómo crees que ha evolucionado?
R: Lo primero que debemos tener claro es que la fisioterapia en un principio no estaba dividida en sectores. Entonces, según ha evolucionado se ha ido desarrollando (deportiva, pediátrica, neurológica…), pero centrándonos en la deportiva, es cierto que se trata de un ámbito en el que existe mucho presupuesto, lo que supone que en materia de maquinaria no existen déficits. Los futbolistas de Primera División, por ejemplo, pueden tener incluso dos o tres fisioterapeutas personales, por lo que en ese punto está bastante avanzada. Sobre todo, la fisioterapia deportiva lo que trata es, más que el tratamiento de lesión, la prevención de la misma.
P: Como profesional, ¿qué aconsejarías a los fisioterapeutas que quieran trabajar enfocados en la fisioterapia deportiva?
R: En primer lugar, a aquellos que estés estudiando fisioterapia, aconsejarles que para decidir cuál es realmente el campo que más les gusta. Que practiquen, si tienen la oportunidad, de experimentar antes en varias ramas, ya que hasta que no lo practicas no vas a saber, tampoco, lo que con certeza te llama la atención.
Si deciden dedicarse a la fisioterapia deportiva tienen que hacer un máster específico para ser realmente formados, por lo que yo les recomendaría que a la hora de trabajar cuando acabas el grado toquen varios campos y después de ello, decidir.
P: ¿En qué consiste, en sí, la fisioterapia deportiva?
R: Lo principal, y en lo que más nos basamos como te he dicho antes, es en la prevención de lesiones y, además, después de la prevención, se centra mucho en la rehabilitación. Por ejemplo, un fisioterapeuta general te puede tratar una lesión bastante bien, pero un deportista de alto nivel, con las grandes exigencias que ello conlleva a nivel físico, necesita una readaptación a la actividad que realice para así ejecutarla de nuevo con éxito.
P: En el mundo del fútbol, cuando un futbolista se lesiona, el equipo en un primer momento da un pronóstico y, después, la baja se prolonga, ¿uno de los motivos puede deberse al tratamiento que le aplican los fisioterapeutas?
R: Puede ser, o no. Realmente, cuando tú inicias un tratamiento algo que tiene un fuerte peso es el aspecto psicosocial, es decir, no depende solo de la labor del fisioterapeuta, porque en la ciencia no hay nada exacto. Por tanto, una lesión no puedes pronosticar que vaya a estar X meses en concreto, ya que también depende mucho del futbolista: si este es capaz de seguir al detalle el tratamiento que le apliques o que incluso el pronóstico falle, por lo que no depende de eso.

P: Está claro que cada cuerpo es diferente y que cada modalidad deportiva requiere un tipo de tratamiento específico, pero ¿qué tipos de dolencias son las más habituales en la fisioterapia deportiva?
R: Depende del deporte que se practique, ya que se modificarán las zonas del cuerpo que se implique más en la actividad. Yo, que concretamente trabajo con dos clubs de fútbol, lo que más trato suelen ser lumbalgias y, a nivel de roturas de fibras, desde los isquios, pasando por abductores y gemelos. También me encuentro con muchos esguinces, lesiones de rodilla… Pero depende mucho de la actividad que se realice.
P: A nivel académico, ¿qué opinión tienes sobre la oferta formativa en relación con el mundo de la fisioterapia deportiva?
R: A nivel académico la carrera es muy general. Para formarte realmente, por ejemplo en la rama deportiva, necesitas un máster.
A nivel académico, sí que es cierto que la formación queda algo obsoleta. Quiero decir, es muy general, por lo que si de verdad quieres formarte en esto deber realizar si o si máster y cursos con los que reciclarte, ya que realmente los fisioterapeutas nunca podemos parar de formarnos.
P: ¿Cuál ha sido tu peor experiencia y la mejor desde que saliste al mercado laboral?
R: Bueno, empezando por la peor, yo creo que al principio cuando realmente empiezas a trabajar. Tú no estás preparado para lo que te vas a encontrar, crees que todo va a ser de color de rosa pero realmente no te preparan, no te avisan de que no todo va a salir bien desde un primer momento. Volvemos al aspecto psicosocial del paciente que te he mencionado anteriormente, es un elemento clave en la recuperación y muchas veces falla.
Y el mejor, cuando alguna lesión de mucho tiempo crónica llega a la clínica y tú eres capaz de paliar los síntomas.

P: Finalmente, ¿qué reflexión haces sobre cómo está actualmente la fisioterapia en relación a la idea que tú tienes de cómo estaba hace 20 años?
R: Ahora mismo ha avanzado a niveles mundiales. Casi a pasos agigantados, cada día se investigan nuevas técnicas pero claro, tú también tienes que seguir en la onda de actualizarte constantemente. Por ejemplo, antes un fisioterapeuta no utilizaba un ecógrafo, hoy en día con esta herramienta puedes conocer muchísimos más detalles de una lesión, por lo que estos avances, como toda la tecnología, influye muchísimo.




